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VULNERABLE .....by PINK GIRL


(COMENTARIOS PARA LA ESCRITORA GRACIAS)

"QUEDATE" CAP 4


Por Bill:

Desperté porque había demasiada tranquilidad a mi alrededor, se me hacía muy extraña. En aquella habitación había una ventana con cortinas azules, estaban cerradas pero pude ver un pequeño ápice de luz solar, ya era muy de mañana. Puse el peluche que encontré en su sitio. Salí de la cama y abrí la puerta, sabía que no encontraría a Tom. Caminé por la sala y encontré mi ropa doblada sobre el sofá, yo sólo tenía la polera de Tom puesta, me quedaba tan grande que parecía un vestido.

¿Ahora qué haría? Tom dijo que hoy hablaríamos. De seguro no pude despertar cuando él entró a su cuarto.

Caminé por toda la sala con más libertad, quería saber más de él, aunque no se lo preguntaría directamente. Aparte del enorme acuario que había en la sala, en un extremo del pequeño departamento había un mueble que me llamó la atención, en realidad no era un mueble, era un piano... Tom sabía tocar ese instrumento.

Tomé mi ropa y me vestí con ella, mi recuerdo de la pandilla, unos jeans ajustados y una polera negra con estampados plateados. Fui al baño a lavarme, todo estaba muy ordenado ahí, impecable y reluciente. Miré mi rostro en el espejo, realmente lucía muy demacrado... necesitaba algo, como maquillaje, pensar en maquillaje me recordaba a Jeremy, mi "hermano" aun no asimilaba lo que me había contado, pero así pasaban las cosas en el mundo de la calle, de qué me quejaba, la marca esta que tenía en el brazo era mi culpa, yo no debí intentar escapar, sería sólo una hora "Maldito cobarde, por tu culpa estás marcado para siempre" pensé y suspiré. Pero como era mi costumbre, si te hundes en la mierda mejor muere, y por alguna razón ahora no quería morir, al menos no se me hacía tan pesado vivir, sentía una comodidad interior, talvez era temporal, pero yo vivía el segundo cada día, días malos y días feos, era mejor asimilarlos por días y no por una vida en general, porque si me ponía a pensar en eso tendría que decir que mi vida no tiene sentido.

Salí del baño y fui hacía la pequeña cocina comedor, tenía mucha hambre, encontré la nota de Tom en la mesa, la leí y sonreí.

-¿Que no alimente a los peces? Pero por qué - Me acerqué al enorme acuario que había en la sala - Hermosos, todos hermosos - Habían muchos peces de colores, eran muy raros, jamás había visto peces así en mi vida.... al lado del acuario había una repisa, debía estar la comida ahí ¿Por qué no alimentarles? - Pobrecitos, encerrados ahí, dependiendo totalmente de los humanos, qué irónico... - Abrí la repisa y encontré unos frascos con dibujos de peces - ¡Genial! Bebés aquí hay comida - Saqué esos frascos y los abrí... ¿Cuál debía darles? - Una mezcla - Tomé en mi mano un puñado de varios frascos y me empiné para alcanzar la parte de arriba de la pecera, abrí mi mano y la comida cayó en el agua, los pececitos rápidamente subieron y empezaron a comer. Pero fui interrumpido por el sonido de la puerta... era Tom.

-¡Bill, qué haces! - Estaba molesto, muy molesto... Retrocedí y tomé los frascos de comida ocultándolos detrás de mi espalda-

-Nada... - Sabía que me había dicho que no alimentara a los peces, pero cómo dejarlos con hambre, no lo entendía. Se me acercó y me extendió la mano para que le pasara los pomos de comida, agaché la cabeza y se los di-

-No lo entiendo Bill, yo te dije que no les dieras de comer - Sacó del mueble una pequeña red para quitarles la comida que les había dado - Si comen demasiado terminan muriendo, se empachan mucho, este tipo de pez no mide cuanto come y termina embotado, hinchado, sin poder respirar.

-Los peces no respiran - Hizo una mueca de disgusto-

-Lo sé Bill, me refiero a que se hinchan y explotan ¿Me entiendes ahora? - Eso me pareció gracioso y no pude evitar reír-

-jajaja, ¿En serio? Pero no tiene sentido, digo, si comes demasiado te llenas y listo dejas de comer jajaja.

-No le veo el chiste, ellos no entienden que se llenan y siguen comiendo igual - Continuaba sacando la comida con el ceño fruncido-

-No entiendo que no se llenen... comer hasta explotar no tiene sentido, además ¿Cómo viven en su ambiente natural si pueden morir de tanto comer? - Estaba curioso-

-Digamos que son mutaciones de peces o algo así, creados en laboratorios, no viven en ambientes naturales, no podrían sobrevivir, son muy delicados y finos, uno debe de cuidarlos hasta de no darles mucho de comer porque sino mueren, todo tiene que ser a la medida ¿Me entiendes? - Ahora si había entendido... cómo era posible que existieran peces así, pero ese tipo de cosas no sólo ocurría con peces, muchas personas eran así, no saben vivir, tienen que cuidarles hasta de los beneficios, las cosas aparentemente buenas terminan dañando sin saber...

-Entiendo - él había terminado de sacar toda la comida que les había dado- Yo lo siento Tom... no sabía - Estaba algo avergonzado, no quería matar a sus peces - No era mi intención hacerles daño - Él suspiró y me sonrió-

-Tranquilo, no tienes que pedirme disculpas, no han muerto, felizmente llegué a tiempo - Que comprensivo era, si fuera Gustav de seguro recibiría un castigo severo-

-Gracias...

-Bill - Puso una mano en mi hombro - Debemos hablar - Sabía que este momento llegaría, pero no estaba preparado, yo saldría de esa casa por más cómoda que me pareciere-

-Yo me iré... -Dije mirando la pecera. Aquellos pececitos no podrían vivir sin los cuidados de Tom, pero yo si, no quería ser una carga más para él-

-Ven conmigo - Me tomó del brazo y me invitó a sentarme en el sofá, me senté y lo miré - Dime, que pasó contigo... - Lo notaba muy nervioso - Bill, tu brazo... Dios, es que realmente es algo muy malo lo que te ha pasado.

-Tú que sabes.

-Nada, lo sé, por eso te pregunto, sé que no me conoces, apenas sabes que me llamo Tom y que ayer fue mi cumpleaños, pero si habría la forma de ayudarte, sólo dímelo, Quiero saber qué ha pasado.

-Hay cosas que no se pueden contar... - Ni sabía qué palabras usar, era demasiado, tendría que relatarle mi vida entera, no lo haría. Una cosa había aprendido en las calles, era no confiar ni en la más confiable de las personas, todos buscan intereses, todos viven por intereses.

-Bill... - Suspiró, creo que él lucía muy preocupado por mí, pero no era para tanto, ahora me sentía seguro - Sabes, sé que hay cosas que no se pueden decir, pero hay otras que no se deben callar.

-Hay cosas que es mejor no escuchar - Un hombre como Tom no entendería mis orígenes, él parecía tan refinado, educado y preocupado-

-Pero quiero escuchar - Me miró fijamente y me tomó del brazo sin venda que tenía - Por favor - Su insistencia me desesperaba... pero qué más daba-

-Bueno... - Suspiré resignado y él abrió mucho los ojos, expectantes... - Vendo mi cuerpo - Lo dije sin más. Me soltó el brazo y se puso pálido - En las noches, un cliente que se molestó conmigo me marcó como pudiste ver, y caminé en las calles hasta que me encontré contigo y pues como veo que tienes tantas cosas, eres un cliente potencial - No sabía por qué había salido todo eso de mi boca, quería probarlo en parte pero al ver su rostro de tanta indignación comencé a arrepentirme de todo lo que dije... Una de las cosas que aprendí para sobrevivir era mentir...

-Bill... - Su labio temblaba, miró a todos lados, estaba algo asustado ¿Por mí o por lo que dije? No lo sabía, miraba muy preocupado, buscando palabras en su mente, qué cosa decirme... - No permitiré que te vayas... y sigas haciendo eso con tu cuerpo, no es bueno para un menor como tú estar expuesto a semejante peligro -Me sentía culpable, en realidad no merecía tanta amabilidad...-

-No tienes que hacer todo eso, soy un desconocido para ti.

-No me importa, podemos conocernos, pero no dejaré que nada malo te pase allá afuera, es muy peligroso - Aún estaba nervioso - Dios, Bill, quédate...

-¿De verdad quieres que me quede? - Dije un tanto incrédulo-

-Si, quiero que te quedes, pero que quede claro que no soy para ti un cliente, no, jamás haría algo así ¿Me entendiste? - Era una seguridad para mí, sin querer había conseguido lo que quería, tener un lugar donde vivir...

-Gracias - Le sonreí tímidamente y él aún no salía de su asombro-

-Oh, Bill... - Me jaló del brazo y me abrazó, fue toda una sorpresa para mí... un abrazo, sólo las personas de confianza como Jeremy se lo permitía. Talvez con el tiempo Tom se convertiría en alguien muy de confianza para mí a pesar de nuestra diferencia de edades. Rodeé con timidez su espalda, él frotaba sus manos en la mía, dándome confort, como consolándome por lo que él creía que había pasado, y mis miedos con respecto a ese día, en el que casi fui violado por Samuel, fueron disipándose poco a poco, me sentí flotar en una nube de tranquilidad. Cerré mis ojos y suspiré, fue cuando él me soltó y se alejó de mí de golpe - Perdón, sólo quiero que sepas que aquí estarás protegido ¿Está bien? - Era más de lo que merecía, las cosas no eran cómo él pensaba... yo lo engañaba, eso me hacía sentir muy culpable. Pero una de las cosas que aprendí era que no era bueno mostrar tus verdaderos sentimientos, eso te hace débil...

-Si lo estoy - Traté de sonreír y lo conseguí, él aún me miraba con cara de preocupación-

-¿Desayunaste? - Aquel chico era demasiado para mí...-

-No... ¿Quieres comer tú? - Pregunté levantándome de ahí y dirigiéndome frescamente a su cocina comedor-

-Yo... debo regresar al instituto, sólo quería saber cómo estás, y felizmente vine antes de que se muriese algún pez - Lo miré y me sonrió, su sonrisa era reconfortante-

-Oh... ¿Te vas? - Pregunté un poco triste-

Por Tom:

Me miraba como un gatito indefenso, como en la película de Shrek. Ahora yo lo veía con otros ojos, cómo es posible que se prostituyera, que anduviera por ahí vendiendo su cuerpo sólo por dinero, y que alguien le haga lo que le hizo, era realmente escalofriante... Debía regresar, pero después de lo que supe lo que más quería era quedarme y estar aquí para él., conmigo nada le faltaría, me encargaría de darle una vida mejor.

-Me quedo - Le sonreí - ¿Quieres cocinar? No lo permitiré, yo te haré el desayuno - Vi un ligero rubor en sus mejillas, me sonrió y negó con la cabeza-

-No has probado mi comida, ayer me hiciste la cena, hoy te haré el desayuno - Estaba conforme, pero no esperaría por el desayuno-

-Hagámoslo juntos ¿Te parece?

-Vale

Hicimos pan queques esa mañana algo tarde, pero era aun de mañana, Bill era muy divertido, pero aun no sabía mucho de él, estaba curioso.

-¿Qué edad cumpliste ayer?

-14 años y tú. Déjame adivinar - Me miró fijamente - Tienes cara de... 20 años - Abrí los ojos, tan viejo me creía-

-No, para nada - Dije algo indignado-

-Jajaja, me gusta cuando te molestas, sé que cumpliste 18 años.

-¡Cómo lo sabes, no recuerdo habértelo dicho!

-Ayer me comí un pedazo de pastel que decía "18 años amor" - La frase era "Feliz 18 años amor" Y pensé en Anita...ella me había traído esa torta en la mañana de mi cumpleaños y desde que Bill entró a casa, o sea ayer, no había pensando en ella. Y como si mi pensamiento la llamase sonó mi celular con la clásica música que le había puesto a ella. Un hincón me pegó en el corazón-

-Disculpa - Le dije a Bill y contesté el celular-

-Tom -Me dijo ella, sonaba algo molesta-

-Anita... que tal

-Pensé que almorzaríamos juntos - Lo había olvidado del todo - Georg me dijo que te fuiste, que habías dejado tu departamento a un extraño.

-Pues si, perdona Anita - Bill se me acercó con harina en sus dedos me tocó la punta de la nariz manchándomela y se echó a reír - ¡Bill!

-¿Está ahí contigo? ¿El extraño? - Tomé un brazo de Bill pues quería echarme harina en toda la cara-

-Si... Bill no.

-¡Tom! -Y colgué el teléfono, necesitaba mis dos manos para detenerlo-

-Muy gracioso pequeño, ven aquí - No me iba a quedar tranquilo, tomé la harina y también le manché la cara-

-Pareces un muñeco de nieve - Se burlaba de mí, pero él estaba igual que yo-

-Muajaja mira tu cara, pareces un mimo - Me sacó la lengua, y tenía un piercing... que curioso, aparte de ese tenía uno en la ceja. Me gustaban los piercings, yo tenía uno en el labio-

Y así pasamos esa mañana los dos, él era impredecible, pero me alegraba su espontaneidad, tanto sufrimiento que habría pasado este pequeño, verlo reír me hacía feliz. No me percaté de la hora... y sólo cuando fueron las 2 de la tarde y Bill descansaba en mi habitación recordé regresar al instituto, tenía clases de Piano y si faltaba me iría muy mal pues era alumno medio becado, pagaba la mitad sólo por mis buenas calificaciones, mi tío me ayudaba con eso, era un buen hombre, lo consideraba prácticamente mi padre.

Me levanté del sillón y me dirigí a mi habitación, debía decirle a Bill que saldría.

-Bill - Toqué la puerta de mi propia habitación y entré, él estaba descansando de costado y cuando me vio, me sonrió y se hizo a un lado para que me sentase en la cama-

-Hola

-Si, hola... sabes, tengo clases ahora en la tarde, debo ir...

-Oh, quieres ir.

-Bueno debo hacerlo.

-Está bien - Me sonrió-

-Bueno...

-¿Clases de qué tienes, qué estudias?

-Estudio música, específicamente Piano.

-Tienes una especie de piano aquí, es muy lindo.

-Si, es un órgano en realidad no es un piano-

Si, eso - Y me dio una idea, para qué ir a clases de Piano si tenía las partituras conmigo, podía ensayar en casa y estar listo para mi examen. Si, eso haría, no saldría.

-Voy a tomar clases aquí, en la casa - Le sonreí-

-Yo quiero escucharte tocar - Se sentó en la cama y me pareció buena idea-

Nos dirigimos a la sala y abrí el pequeño piano que tenía ahí, propiedad de mi tío Oscar, y me senté haciéndole un espacio a Bill para que se sentara a mi lado.

-Bueno Bill ¿Qué pieza te gustaría escuchar?

-Me gusta el rock y el pop claro.

-Bueno, a mí un poco, pero prefiero la música clásica, eso es lo que toco por ahora y algo de jazz entre otros géneros.

-Oh... entonces toca la que más te gusta.

-Está bien - Toqué un Minueto que aprendí en mi niñez, la melodía no era tan compleja, pero a mí me traía recuerdos de mi madre.

-Es hermosa, me parece muy conocía, alguna vez la escuché... - Sonreía y apoyó su cabeza en mi hombro, fue cuando las notas se hicieron muy distorsionadas, trataba de seguir tocando, de concentrarme, pero me sentí un tanto nervioso, comenzó a hacer mucho calor... - Suena raro pero me gusta - Dijo y terminé de tocar la distorsionada melodía-

-Jejeje, he olvidado mucho - Tomó mi brazo y se acomodó más en mi hombro - Por lo visto tienes sueño.

-hmm - Hizo un sonidito gracioso, tenía sueño-

-Ven aquí - Lo rodeé y lo alcé en mis brazos - Vamos a dormir - Abrió sus ojos y me rodeó el cuello con sus brazos y luego me sonrió. Me quedé viéndolo por un instante, se veía tan frágil, puso su cabeza en mi cuello y lo sentí suspirar. Caminé hacía la habitación y el timbre de la puerta sonó-

-Tom, alguien llama a tu puerta - Dijo sin querer soltarme del cuello habiendo llegado a la cama para recostarlo ahí-

-Si, lo sé, voy a ver quien es ¿Me sueltas? - Soltó una rosita-

-No, estoy cómodo contigo.

-La puerta Bill.

-Al carajo la puerta, quédate conmigo.

-No puedo... debo abrir

-Todo es debo para ti - Me miró soltándome lentamente terminándose de acostar en mi cama

-¿Qué dices?

-Que la palabra que usas es "debo". Debo haber esto, debo ir a tal lugar, etc. nunca dices quiero hacerlo - Tenía razón. Lo miré fijamente y me pareció muy hermoso, realmente no quería abrir esa puerta, pero debía hacerlo -

-Lo sé Bill, pero existen responsabilidades, debo abrir esa puerta porque alguien está tocando-

-Ve entonces, yo te espero aquí... - Eso me sonó muy insinuante más aún cuando se pasó la lengua por sus labios. Había olvidado por un momento que era un chico con experiencias con hombres; tragué saliva, debía ser precavido, talvez confundía mis acciones-

-Voy - Pero no dije más que eso. El timbre volvió a sonar y tuve que salir-

Al abrir la puerta Anita yacía con el ceño fruncido, con su violín sobre sus hombros.

-Tom kaulitz ¿Qué está pasando contigo? -Cómo explicarle, ni yo mismo sabía...


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tom!!! yo se como explicarle a Anita
mira le dices que te encontraste a un adorable y muy lindo niño en la carretera y ahora se va a quedar para siempre contigo y que terminas con ella xD
eso es lo que deveria decir Tom o lo que yo quiero que diga????
jajajajajaja......
bueno la verdad es que me gustan todos los fic de Pink Girl piensso que ella es una execente escritora :D

Pink Girl dijo...

*-* que linda, quisiera q le diga todo eso XD veremos
este fic me hace sufrir un poco u.u necesito ponerme al día, pero no lo dejaré! escribiré :3

 
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