(COMENTARIOS PARA LA ESCRITORA, GRACIAS)
Familia Disfuncional CAP 2
Por Bill:
En la suavidad de esa cama pude dormir... mi mente se puso en blanco, como una sensación de mucha paz y tranquilidad, mis sentidos de alerta simplemente se adormecieron y caí en sueños... pero mi interior estaba lleno de temores...
Flash Back:
Edad: 8 años:
Vivíamos en una casa muy pequeña, en los suburbios de Bremen, mi ciudad natal, vivía con mi padre Jorg Trümper, mi madre prácticamente no paraba en casa, regresaba de trabajar una vez por mes, a veces ni regresaba... Era hijo único, pero mi padre me decía que era hijo de otro hombre, que mi madre era una callejera, él tenía muchas mujeres. Nunca me llevé con mi padre, él era muy violento, era mucho de tomar y cuando regresaba ebrio a la casa y siempre terminaba golpeándome, yo ya estaba harto...
-¡Bill! - Me llamó gritando - ¡Donde mierda está mi comida, te dejé dinero en la mañana! - Salí de mi habitación, estaba terminando de hacer mi tarea de la escuela. Corrí hacia la cocina y le serví un plato de sopa. Era lo único que pude preparar pues no pude comprar, con el poco dinero que me dejó, más que verduras en la tienda, así que las piqué todas, las puse en una olla con agua y algo de sal. No se me ocurrió otra cosa.
-Perdón papá - Dije poniéndole plato en la mesa y se sorprendió por lo que le serví.
-¡Pero qué mierda es esto! ¿Sopa? ¡Vengo del trabajo cansado, agotado y me das sopa! - Agarró el plato y me lo lanzó, me hice a un lado para que el líquido caliente no me quemase la piel; me asusté, y sólo pude correr rumbo a mi habitación, pero él me cogió del brazo y sacó su correa-
-¡A dónde crees que vas! ¡Sin disciplina no se aprende!
-¡Papá por favor! - Pero me castigó duramente ese día, como otros días-
Me lanzó al piso y me pateó el estómago dejándome sin aire, cansado de gritar y de llorar me encogí en mi mismo y ahí me quedé hasta que se fuera.
Me levanté y recogí todo lo que había ensuciado y limpié la casa.
Un vecina cansada de escuchar todos mis gritos cada día denunció el hecho a la policía... esa tarde llegaron y me sacaron de ahí. En la noche una señora me hacía muchas preguntas, estaba muy nervioso, pues sentía que me quitaban una "familia" para querer meterme en otra.
-Bill ¿Puedes oírme? - Tenía la mirada perdida en algún lado - Ven conmigo - Me llevó a una habitación blanca totalmente, había un enorme espejo una mesa y una silla. Me senté ahí.
-¿Qué lugar es éste? - Pregunté-
-Una habitación para hablar.
-Oh...
-Bill, nos hemos contactado con tus tíos ¿Recuerdas a María y Fernando? - María era hermana de Elena, mi madre, había estado en su casa algunas veces allá en Bremerhaven-
-Si, María es mi tía, ellos son mis tíos.
-Exacto ¿Qué te parece la idea de vivir con ellos? - En realidad no me parecía ni buena ni mala.
-No sé...
-Ellos podrían acogerte en casa, si no quieres te quedarás en una casa temporal que te mostraré - Había oído que llevaban a albergues a los niños que no tenían familia, pero teniendo al menos tíos podía quedarme con ellos - Depende de ti, si lo deseas.
-Bueno, ir con mis tíos está bien, si ellos quieren.
-Muy bien Bill, eres un buen niño, vivirás con ellos, hoy dormirás aquí, los llamaremos para que te recojan ¿Está bien?
-Si... - Que más daba, no regresaría con mi padre. Talvez en casa de mi tía María podría ver a mi madre, talvez...
Esa noche la pasé ahí, en ese lugar desconocido para mí, habían otros niños también.
Mis tíos me recogieron al día siguiente, María era una buena mujer, pero por alguna razón Fernando no me caía bien, era muy frío y déspota, él sería el causante de que no quisiera tener realmente una familia, el concepto de familia que tenía era muy distinto al de los demás... desde mis ocho años de edad me consideré solo en este mundo...
Fin del flash Back
Desperté un rato, pues pequeñas imágenes de mi niñez vivieron a la mente. Estuve moviéndome en esa cama tan suave y me entró en sueño otra vez, era de madrugada y no pensaba en despertar aun... aquella herida que tenía me picaba mucho, me hacía recordar otra parte de mi vida que deseaba olvidar, así que abrazando la almohada me puse boca a bajo aspirando aquel aroma tan agradable... era él, el chico de rastas, Tom.
Por Tom:
Prácticamente dormí 4 horas. Ya era de mañana, y debía alistarme para ir a mis clases, debía entrar a las 8:00 AM en punto. Me levanté con mucha pereza hasta que recordé todo claramente, Bill, el chico que recogí en la noche de ayer...
Me dirigí a mi habitación y toqué la puerta, le dije que hablaríamos hoy, pero en realidad no tenía mucho tiempo. Por lo general demoraba en alistarme unos 20 minutos, así que mirando el reloj sólo podía hablar con Bill unos 15 minutos, no alcanzaría si buscaba algún tipo de explicación acerca de él... Volví a tocar la puerta pero al ver que no me respondía simplemente entré.
Estaba dormido boca abajo, con todas mis sábanas revueltas entre sus piernas, un poco descubierto, tenía mi polera como pijama. Pude ver su pierna desnuda salir por un lado de las sábanas.
-Psps... Bill - Llamé algo incómodo, no quería despertarlo pero debía sacar mis cosas que llevaría al instituto e intentar hablar con él también-
-Hmm - Hizo un sonidito muy lindo. Me acerqué y tomé parte de la sábana para cubrirlo, en especial su pierna, no quería seguir viéndolo así, se veía... vulnerable y muy tranquilo ¿Acaso no dormía en mucho tiempo? - Tom... - Suspiró mi nombre, un escalofrío recorrió mi cuerpo; decidí mejor salir, no estaba bien permanecer ahí más tiempo.
-Que descanses... - Le susurré después de coger mi mochila y algunas partituras que debía llevar para mis clases de piano, también saqué algo de ropa para vestirme en la sala y recordé sacar la ropa de Bill que había puesto en la máquina anoche.
Salí con mucho cuidado y me fui al cuarto de lavado, saqué sus ropas de ahí y las dejé sobre el sofá, fui a la cocina comedor, me serví un vaso de leche y mientras lo tomaba tomé un papel para escribir una nota
Bill:
Buenos días, no quise despertarte, lamentablemente debo salir a clases hoy y regreso en la noche, saqué tu ropa de la máquina está en la sala, y puedes comer lo que quieras. Por favor no salgas, no habrás la puerta a nadie. Espero hablar contigo cuando regreses.
Pd: No alimentes a los peces.
Tom.
Después de eso, dejé la nota sobre la mesa y salí, estaba tarde. Antes de cerrar la puerta suspiré, no quería dejarlo solo, quería saber de él, pero que más da debía ir a estudiar... sólo esperaba que al regresar lo encontrase en casa.
Manejé mi auto rumbo al Instituto, hoy tendría prueba de canto, no era lo mío, pero era un curso indispensable, después estaban clases de teoría musical, un break para almorzar, luego práctica de Piano y finalmente Historia clásica de la música. Era mucho, y no quería.
Ya en el instituto, en clases de Canto mientras mis compañeras cantaban y nosotros los varones, que éramos los tenores repasábamos las notas y partituras, me senté al lado de mi compañero Georg, él y yo éramos prácticamente mejores amigos. Estaba algo nervioso por todo lo ocurrido, debía hablar con alguien, me estaba impacientando y mucho.
-Hola Georg - Le saludé sentándome a su lado-
-Qué hay Tom, ayer te fuiste temprano de tu propia fiesta - Dijo aun mirando las partituras de la canción que practicaríamos ese día-
-Si, ya me conoces.
-Aja, qué te cuentas - Dijo tarareando la melodía que ensayaríamos en clase-
-Pues... - De todas maneras no iba a ser directo, debía pensar en algo - Sabes, tengo un amigo que mientras manejaba...
-Tom - Me llamó alzando una ceja - Ya déjate de rodeos, soy tu único amigo, qué pasó - Me había pillado como siempre-
-Bueno, ayer me encontré a un muchacho en la calle y... - No pude continuar-
-¿Y? la, la, la...- Aun seguía tarareando la estúpida melodía que cantaríamos, no me prestaba atención del todo-
-Bueno, y pues lo invité a subir y... - ¡Era difícil!-
-¿Y? la, la, la... - Me terminó de impacientar-
-¡Georg! - Le quité las partituras - ¡Que me llevé a casa a un desconocido que estaba caminando en la calle! - La clase me miró, junto con mi profesor de canto y todas las nenas que ensayaban-
-Joven Kaulitz - Dijo el profesor - Silencio por favor, ya será su turno-
-Perdón profesor - Estaba molesto, creo que más que molesto estaba intranquilo, quería regresar a casa-
-¿Tom? - Al fin tenía la atención de Georg - ¿Pero qué dices? Cómo que te llevaste a un desconocido así a tu casa.
- Se estaba mojando, había una tormenta ayer, no tenía casa...
-¿Y le creíste?
-Pues claro, es un pequeño, tendrá 14 años, aun no le he preguntado.
-Y ahora donde está
-En mi casa
-¡Que! Pero tú si que eres un tonto, cómo que está en tu casa, de seguro cuando regreses no encontrarás nada, tus cosas tom, las cosas de tu tío, los peces valen una fortuna, donde tienes la cabeza; sabes, eres muy, muy ingenuo - "ingenuo. Ingenuo, ingenuo, tonto, idiota, imbécil" por Dios tenía razón, que tonto fui-
-Pero... - No sabía qué más decir -Georg, debo regresar a mi casa.
-Te perderás clases de Piano en la tarde.
-Yo regreso en la tarde, debo ver cómo está Bill... digo ver mi casa - Me levanté y sigilosamente salí por la puerta y me enrumbé a hacia el aparcamiento de autos. Llegué subí a mi auto y salí del instituto, estaba impaciente... Georg tenía razón, había confiado mi departamento a un total desconocido...
3 comentarios:
U.U
Tom no tiene que desconfiar de Bill
Bill es un pequeño niño inosente >.<
espero que Tom le saque info a Billy
esta muy bueno
:D
*O*
Ahhhh
Ya quiero la conti ^^
Lo comenze a leer anoche, y ya quiero el 3
no demores...
un buen fic ^^
EXCELENTE HISTORIA!!!
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